hace siglos
que no me atrevo a decírtelo
tendrás
que interpretar mis silencios
y las nubes
que emanan de mi piel
cuando te acaricié
el cabello
pensaba que me buscarías
mas no
cualquier carta
era un enemigo reflejado
en los cuchillos
de tu ventana
siempre te observé
de lejos
desde otra galaxia
quizás
quizás
siempre supe de ti
con sabor a canela
con tu media sonrisa
que me hechizaba
al menos
aquella niña
que fuiste
aún corretea
por todos
mis silencios
© Frantz Ferentz, 2011
Sem comentários:
Enviar um comentário